El Gran Bosque Malov

Verde, era lo único que podías ver si volteabas tu vista hacia el norte, y si volteabas al sur seguías viendo color verde. Y si te preguntas, también había mucho verde al este y más verde aún al oeste. El Gran Bosque Malov era el pulmón principal del reino de Runan, el reino frío ubicado justo a la mitad de todos los países. Como todo bosque, la flora y la fauna era rica y vasta. Arroyos y lagunas se podían encontrar entre las arboledas, incluso si te perdías, las cuevas misteriosas eran perfectas para refugiarse de la noche o del mal clima.

Las humanos que vagaban por el Gran Bosque se llevaban muy gratas sorpresas; fantásticas criaturas se aparecían a los afortunados, los sobrevivientes narraban maravillados acerca de las misteriosas flores que reían y flotaban mientras esparcían polen, que a su vez daban vida al momento haciendo brotar nuevas flores. Sin embargo, el otro tipo de sobrevivientes, horrorizados narraban como, lo que ellos consideraban unas frágiles hadas, las cuales divertidas se posaban en los hombros o manos de las personas perdidas, pidiendo por agua y guiándolos a lo que parecía la villa de las criaturas, donde las hadas gustosas los recibían con comida por haber ayudado a una de las suyas. Los que lograron escapar, tenían pinchazos o pequeñas mordidas; a veces, el Gran Bosque Malov regresaba los restos frágiles de los que no tuvieron tanta suerte con las misteriosas hadas.